Nuevas etiquetas nutricionales: mira qué ha cambiado en los envases de los alimentos (se ha vuelto más fácil)

¿Por qué cambió?

Al no existir leyes sobre este tema, era común que algunos fabricantes “disfrazaran” alguna información nociva para la salud como una estrategia de marketing, dificultando a los consumidores la lectura y comprensión de la información contenida en las etiquetas.

Un ejemplo práctico es, un consumidor que debería reducir su consumo de azúcar, al ir al supermercado decide comprar un jugo en caja, pensando que es una opción natural y saludable, y la gran mayoría de estos jugos son industrializados con un alto contenido de azúcar.

Los consumidores comenzaron a sentirse perjudicados al no poder identificar claramente esta información y comprender el impacto en su salud al consumir los productos que compraban y es por eso que en octubre la ANVISA determinó estas nuevas reglas.

¿Cuáles son los principales cambios?

Etiquetado nutricional frontal:

Los productos que tengan un alto contenido de azúcar, grasa y/o sodio deben agregar la lupa frontal en el frente del empaque en la parte superior que sea fácil de ver. Conteniendo de forma simplificada información sobre grandes cantidades de nutrientes que pueden perjudicar tu salud, sin necesidad de voltear la etiqueta.

Mira los modelos:

Se consideran incluidos en la lupa frontal los productos que superen lo siguiente:

Cabe mencionar que el tamaño de la lupa frontal varía según la etiqueta.

Nueva tabla nutricional:

Otro cambio que tiene gran impacto en el packaging es el cambio en la tabla nutricional. Mira los cambios:

Información nutricional: información sobre azúcares totales y añadidos (resaltado en rojo en la imagen de arriba), de nutrientes por 100g o 100ml (resaltado en azul B), el porcentaje de los valores diarios proporcionados por la porción (resaltado como marrón C) y el número de porciones por paquete (resaltado en verde D).

Lista de ingredientes: La tabla nutricional debe estar pegada a la lista de ingredientes, en la misma superficie, y no puede dividirse ni ubicarse en zonas ocultas, deformadas o difíciles de ver. Excepto bultos pequeños, inferiores a 100cm².

Colores y contrastes: La nueva norma determina que las letras de la tabla sólo deben ser negras y el fondo debe ser blanco. El objetivo del cambio es eliminar las posibilidades de que los fabricantes elijan colores que puedan dificultar la lectura de la información.

Plazos para la adaptación de nuevas etiquetas:

Nuestra conclusión sobre los cambios:

Esta regla es beneficiosa y alienta a los consumidores a tener una cultura de evaluar cuidadosamente los productos elegidos en el lineal y comprender cómo impactan su salud. 

Al mismo tiempo que se reduce la oportunidad de que “fabricantes maliciosos camuflen” información relevante para obtener mayores ganancias.

El consumidor tiene derecho a la información, y este proceso regulatorio de etiquetado nutricional definido por ANVISA es un procedimiento necesario, relevante para la seguridad y defensa del consumidor.

Fuente: sitio web de ANVISA